Las plantas medicinales de la región florística mediterránea: el Garraf. (continuación)

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Cómo se determina la vegetación en la comarca del Garraf por el clima y el suelo: adaptaciones.

Por sus peculiaridades climáticas típicamente mediterráneas, el Garraf ha desarrollado una vegetación originaria, diferente y única en todo el principado, determinada por las escasas pero torrenciales lluvias de primavera y otoño, suaves temperaturas en invierno, y calurosos y secos veranos. Esta última característica tiene gran importancia porque delimita el número de especies vegetales capaces de adaptarse al ambiente. Las plantas para poder resistir estas condiciones, desarrollan una serie de adaptaciones encaminadas a la supervivencia y a mejorar la efectividad en la competencia con otros vegetales.

Adaptación a la aridez:

La aridez estival quizá resulta el factor ecológico más característico del clima mediterráneo y, en concreto, es el rasgo más plausible en esta zona. Las plantas del Garraf deben soportar la falta de agua cuando más la necesitan, es decir, cuando la radiación solar es más intensa.

- Una primera estrategia adaptativa consiste en desarrollar todo un ciclo vital (germinación, crecimiento, floración y fructificación) durante el corto espacio de tiempo que hay suficiente agua en el ecosistema. Lógicamente las plantas que son capaces de seguir esta estrategia son pequeñas y de vida corta.

Un rasgo común a todas las plantas, debido a que la disponibilidad de agua es un factor limitador, es el mayor desarrollo de las raíces. Hacen falta raíces más profundas para llegar a niveles donde el suelo aún está húmedo en verano, o raíces más eficazmente repartidas bajo la superficie del suelo para que absorban el agua de las lluvias de poca intensidad.

- Otra estrategia consiste en almacenar grandes cantidades de agua dentro de los tejidos de la planta, para hacer uso de ella en las épocas estivales donde se vive mayor sequía. Ejemplo: Pita (Agave americana), chumbera (Opuntia ficus - indica).

- Mucho más radical es la estrategia evolutiva de las especies vegetales que las lleva a reducir el número de hojas hasta llegar a una relación equilibrada entre el número de hojas y la disponibilidad de agua.

- Pero la estrategia adaptativa más extendida consiste en disminuir la transpiración, y una manera de conseguirlo es envolviendo la epidermis de las hojas con ceras impermeables.

También un vello de pelos puede reducir significativamente la renovación de la capa de aire que rodea la hoja, disminuyendo la evaporación del agua. Este vello actúa también de pantalla reflectora de los intensos rayos de sol en verano.

Otra estrategia para disminuir la transpiración es reducir la superficie de las hojas, pese a tener la misma cantidad de materia viva. Esto implicará que las hojas sean más pequeñas y gruesas al disponer de menos superficie para un mismo peso de hoja. En consecuencia las hojas de las plantas adaptadas a lugares secos suelen ser menos tiernas que las hojas de lugares más húmedos. Este aspecto de hoja dura, opaca y reluciente (efecto provocado por la presencia de ceras impermeables), se denomina esclerofília.

No obstante, la manera más eficiente de disminuir la transpiración consiste en cerrar losestomas (verdaderasventanas que controlan la salida y entrada de gases desde los espacios intercelulares de la hoja hacia la atmósfera). Esta acción limita la absorción de dióxido de carbono y por tanto el proceso de fotosíntesis. Es por este motivo que muchas plantas que habitan en lugares secos son de crecimiento muy lento (al tener los estomas cerrados durante mucho tiempo, les impide sintetizar nuevos tejidos y crecer rápidamente). Debido a este efecto, es frecuente en los ecosistemas mediterráneos el caso de especies que viven muchos años. Hay olivos que son capaces de vivir miles de años, de ahí su gran valor botánico y económico.

Para evitar la deshidratación producida por la transpiración foliar a través de los estomas, se desarrollan comunidades vegetales muy densas, dentro de las cuales no corre el aire y el ambiente es húmedo. Por ejemplo: la maquia.

Adaptación a la depredación:

De todo el mundo es sabido que los vegetales forman el primer escalón en la cadena trófica. Esto quiere decir que son los productores de la materia orgánica que mantiene el ecosistema. Dentro de un clima duro como es el del Garraf, por su condición de ambiente seco, la vegetación tiene una productividad baja, con lo cual no puede compensar las pérdidas producidas por la alimentación de los herbívoros. La perennifolia es una repuesta, pero hay otras adaptaciones como:

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